Todo ocurrió en la quinta jornada de Liga de la temporada 1963/64, cuando el entrenador rojiblanco decidió dar una oportunidad al joven Iribar, a pesar del buen rendimiento que todavía Carmelo seguía ofreciendo. Sin embargo, para poder solventar al club económicamente, los dirigentes decidieron rebajar, en un porcentaje considerable, los sueldos de los integrantes del cuerpo técnico, camiseta del madrid así como el de muchos jugadores.